La gran mayoría de la población mundial hoy en día siguen rigiéndose por ciertos viejos estándares de las épocas antiguas donde poseer un gran número de piezas de oro para adornarse es lo ideal pero muchas veces las personas no pueden costear piezas de joyería de buen valor.
Aunque muchas personas elijan las piezas de joyería de bajo valor por su pureza existe un grupo que decide ir por una alternativa aún más económica que es la bisutería. El arte de las prendas “bañadas” en oro aunque no se niega que dichos baños existen la verdad es que la bisutería es todo lo contrario.
Muchas veces es normal escuchar el término “JOYERÍA VS BISUTERÍA” lo cual señala el constante conflicto que hay entre las personas que prefieren una pieza original de oro sin importar la pureza a una pieza “bañada” supuestamente en oro o plata.
Las ventajas de lo real contra la fantasía.
Regularmente la ventaja más obvia entre una pieza de oro autentica y una de fantasía es el valor de compra y venta, mientras que la compra de una pieza de oro puro es cara su valor puede hasta quintuplicarse pasado el tiempo mientras que la pieza de fantasía de hecho se devalúa conforme pasa el tiempo.
La otra y la más importante para muchos es que las piezas de oro autentico no producen reacciones adversas al cuerpo humano mientras que la composición de muchas de las piezas de bisutería es toxica para las personas a corto, mediano y largo plazo.
Las personas que compran las piezas de oro con grado de pureza menor siempre verán ganancias pasado el tiempo debido a que la pieza adquiere más y más valor hasta tener el valor de una pieza de gran pureza pasado los años esto lamentablemente no aplica con la bisutería.
Lo barato a veces sale caro.
Muchas veces las personas compran piezas sin revisar antes la calidad de estas y terminan siendo estafadas flagrantemente por lo cual siempre antes de comprar una pieza se debe estar seguro de que se está buscando en ese momento en un lugar apropiado.
Aunque en ocasiones los precios sean tentadores al conseguir algo por una fracción del precio es preferible pagar la pieza original si el propósito es lucirla uno o convertirla en una inversión las mejores opciones suelen ser las piezas de mediano valor.